Eugenia: Naciste en 1947 y yo en 1955, atravesamos el mismo período histórico, trabajamos tal vez con los mismos materiales (hablo de las marcas de la época), nos pidieron una y otra vez el documento de identidad en noches interminablemente oscuras, y no sabía de vos ni de tu obra. Nunca es tarde cuando la dicha es buena, dice el dicho. Y así con tante gente que luego conocí, con gente que no conozco todavía. tengo una obsesión: derribar los tabiques. Ir más allá de la literatura hasta donde se fotografía, se pinta, se canta y se esculpe. Y cada día me felicito por este deseo mío, porque supe de los otros, de sus artes y pensamientos. Me alegra dejar este comentario, Eugenia. Porque tu obra es sólida, profunda, poderosa, valiente. Un beso.
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Eugenia: Naciste en 1947 y yo en 1955, atravesamos el mismo período histórico, trabajamos tal vez con los mismos materiales (hablo de las marcas de la época), nos pidieron una y otra vez el documento de identidad en noches interminablemente oscuras, y no sabía de vos ni de tu obra. Nunca es tarde cuando la dicha es buena, dice el dicho. Y así con tante gente que luego conocí, con gente que no conozco todavía. tengo una obsesión: derribar los tabiques. Ir más allá de la literatura hasta donde se fotografía, se pinta, se canta y se esculpe. Y cada día me felicito por este deseo mío, porque supe de los otros, de sus artes y pensamientos. Me alegra dejar este comentario, Eugenia. Porque tu obra es sólida, profunda, poderosa, valiente. Un beso.
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